sábado, 9 de abril de 2011

Terrorismo periodístico en el Perú

La idea central que tratan de transmitir los medios es que Humala es un peligro para la democracia. La pregunta es: ¿cuál es el riesgo qué representa Humala para el Perú? Este domingo 10 de abril los electores demostrarán en las urnas si el discurso del miedo de este periodismo chato, todavía logra sus objetivos en la política peruana.

Abner Barrera Rivera / AUNA-Costa Rica


Por disposición del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) de Perú, el pasado 03 de abril fue el último día para la publicación de encuestas o sondeos relacionados con las elecciones presidenciales. Contra todos los pronósticos y los deseos de la derecha neoliberal encabezada por el presidente Alan García, el candidato Ollanta Humala de Gana Perú -única agrupación política anti sistema neoliberal- aparece solo, en primer lugar en las encuestas, con varios puntos de ventaja sobre los otros contendores. Quienes le siguen, son tres candidatos de derecha que apuestan al continuismo del gobierno aprista.


En estos días en que las empresas encuestadoras no pueden divulgar resultados, los medios masivos de publicidad en manos de la oligarquía peruana se han encargado de publicar sus propias “encuestas”, con noticias, editoriales, columnas de opinión, titulares, entrevistas, reportajes, etc., en los cuales el maniqueísmo político es marcado: satanizar a Humala y sacralizar a cualquiera de los otros tres candidatos (estrategia periodística que no hace otra cosa que dividirlos a ellos mismos).


La idea central que tratan de transmitir los medios es que Humala es un peligro para la democracia. La pregunta es: ¿cuál es el riesgo qué representa Humala para el Perú? En realidad el candidato de Gana Perú es un peligro para el actual sistema, caracterizado por la corrupción, la impunidad y el desmantelamiento de los recursos nacionales a favor del empresario y el capital extranjeros, por eso tratan de impedir su triunfo el próximo 10 de abril.

En este desconcierto, la derecha peruana ha hecho un frente común y se ha dedicado a falsear y calumniar las propuestas de Ollanta Humala. Cuando él ha dicho que le “preocupa el trato de los intereses peruanos en Chile” ha sido calificado de antichileno; por señalar que quiere modernizar a las Fuerzas Armadas dándoles capacidad tecnológica y mejorar los sueldos, lo han acusado de querer fomentar una carrera armamentista; por proponer cambiar la Constitución, para que se priorice a los peruanos sobre los extranjeros (la Constitución actual auto prohíbe dar beneficios y promover a las empresas peruanas) ha sido tildado de buscar la reelección como Hugo Chávez; por plantear la defensa y el acceso de las mayorías a la propiedad le han llamado estatista.

El periodismo de derecha en el Perú se ha convertido en terrorismo informativo; lo que anuncian en estos días refleja su testarudez y pequeñez. El director de El Correo refiriéndose a Humala invoca: “Peruano pensante -porque me niego a darle esa categoría a quien vota por Humala- es el momento de que tu voto sea útil. Vota reflexionando que el país está en peligro de entronizar una larga dictadura, que vamos a acabar siendo indefectiblemente una colonia de los venezolanos (…) si gana el chavista.”

El editor de Expreso indica: “El cierre de campaña del candidato antisistema Ollanta Humala en Lima…pintó de cuerpo entero al personaje que busca gobernarnos a partir del 28 de julio (sin fecha de expiración). Así la típica verborrea populista buscó encandilar a sus simpatizantes, ofreciendo con irresponsabilidad de un demagogo: leche, atención médicas, medicinas, empleos (…) Esa modalidad de engatusar a la gente ya la hemos vivido los peruanos, y hoy la padecen nuestros vecinos ecuatorianos, venezolanos y bolivianos”.

El director de El Comercio advierte: “Es decir, volver a caer en las honduras del autoritarismo caudillista, el desorden y el derrumbe de la iniciativa privada a manos del intervencionismo estatal, todo lo cual, como bien lo sabemos, nos llevará a una vorágine de corrupción, pobreza, confrontación y perturbación social, como lo hemos sufrido en carne propia en el pasado y como está sucediendo actualmente en naciones hermanas, como Venezuela.”

Y en estas desbocadas mediáticas no podía faltar Vargas Llosa, quien se ha referido a Humala como sida o cáncer terminal. Las diatribas de este predicador neoliberal (que se pasea por todo el mundo defendiendo la economía de libre mercado) no hacen si no confirmar que el candidato de Gana Perú ha apostado por defender los intereses nacionales, poniendo la economía al servicio de la gente y no al revés; que está dispuesto a luchar para que los monopolios y oligopolios no continúen saqueando las riquezas del Perú.

Los desvelos en estos días de la caverna peruana indican que Gana Perú quiere una economía en la cual los trabajadores tengan derechos efectivos y el Perú pueda decidir sobre el uso de sus recursos naturales. Este domingo 10 de abril los electores demostrarán en las urnas si el discurso del miedo de este periodismo chato, todavía logra sus objetivos en la política peruana.

1 comentario:

Unknown dijo...

Interesante Abner.
Cuando converso con le gente acerca de Ollanta, lo que salta es el miedo, miedo que las cosas retrocedan, que el crecimiento del Perú, lo cual nos ufanamos, se detenga por consiguiente retrocedamos a tiempos de hiperinflación.
Una de las cosas que habría que enfatizar es que Ollanta garantice un crecimiento arriba del 7% anual, con una inflación igual a menor de los últimos 10 años.
Me da la impresión que su propuesta anti sistema tiene fuerza tema de inseguridad ciudadana, como Keiko, que son los candidatos que pasarían a la segunda vuelta.
Digo esto porque me preguntaba como algunos; qué tiene en común estos dos candidatos que?. Se les ve como “autoritarios”. Tengo la impresión que la población peruana, mas del 50% (la suma de Ollanta y Keiko) percibe como candidatos que pueden solucionar el tema de seguridad ciudadana y la corrupción.
Son dos temas que son muy sensibles en nuestra población, que ninguno de los candidatos pudo ubicarlo en su discurso como ideas fuerza, porque cómo se entiendo que mas de la mitad de la población quiera en retroceso?, o tenemos un instinto tanático y autodestructivo, creo que no, pienso que los candidatos subestimaron a la población y esta elecciones como las anteriores mostraran la disconformidad de un sector importante de la población, que tiene un sueldo de s/ 1,000, o sea vive con una sueldo de 1 dólar diario.
Otro detalle suelto; los que votaremos por Ollanta no las jugamos, porque si realmente toma actitudes autoritarias o hace al menos el 30% de las cosas que se le acusa tendremos que pararnos y tomar medidas, creo que en este momento es nuestra opción, no las jugamos, pero el que no arriesga no gana... Gana Perú
Abrazos Abner